Este último fin de semana preferí dedicarme a lo salado. Quizás esta entrada debería escribirla mi hijo que ha sido quien ha cocinado el plato que os traigo. Le apetecía ayudarme y pensando, pensando se me ocurrió que lo ideal era que el plato, cuando estuviese listo tuviera una aspecto tan bonito que cocinar se convirtiera en una de sus pasiones.
Compré pasta brisa en Mercadona, para que no me mirase con malos ojos si le hacía amasar mucho, y nos pusimos manos a la obra. Había que cortar cebolla y de esa parte me encargué yo, pero el resto fue trabajo suyo. Me encanta verle disfrutar y hacer de chico responsable. El más pequeño revoloteaba por la cocina y le dejamos amasar los recortes de la pasta con un rodillo para hacer unos palitos para hornear. ¡Pura diversión!
Por aquí os dejo la receta. La acompañamos con una ensalada fresquita con un aliño suave…
QUICHE LORRAINEIngredientes: 2 Cebollas Cortadas en Juliana 8 Lonchas de Bacon Ahumado 4 Huevos 300gr de Nata para Cocinar 1 Cucharadita de Sal Una Pizca de Pimienta Mantequilla para engrasar 2 Cucharadas de Aceite de Oliva Virgen 2 Cucharadas de Parmesano Rallado Preparación: 1. Precalentar el horno a 200º. Engrasar un molde redondo para quiche con fondo desmontable o 6 moldes individuales. 2. Rehogar la cebolla con el aceite de oliva hasta que este transparente ya añadir el bacon cortado en tiras finas hasta que esté dorado. Sacar a un plato y escurrir la grasa. 3. Estirar la masa y colocarla en el molde, pinchar con un tenedor para evitar que suba. Cortar el sobrante. 4. Batir los huevos en un cuenco, añadir la nata líquida, la sal y la pimienta. Rallar el queso parmesano y añadirlo a la mezcla. 5. Distribuir la cebolla rehogada y el bacon sobre la masa. Verter por encima la mezcla de huevos y nata. 6. Hornear durante 30 minutos. Dejar en el molde diez minutos y luego enfriar sobre una rejilla. 7. Se puede comer frío o caliente. Si lo acompañas con una ensalada estará deliciosa.
Para una salida al monte va de miedo. Espero que os animéis. Javi la hizo estupendamente y sólo tuve que ayudarle con la cebolla. Para los habilidosos en la cocina será coser y cantar y, para los que le tenéis un poquillo de respeto será un paseo con premio final: la sonrisa de quien lo comparta con vosotros. Espero que os guste.
Un beso delicioso.
